Alfredo Castellanos, el mejor
vendedor de ilusiones del mundo
Por: Manuel Padilla Muñoz
Hay que reconocerlo, Alfredo Castellanos, ex director de Seguridad Pública del Municipio de Torreón, debe ser el mejor vendedor del mundo. Dígalo si no: logró “venderle” la idea al alcalde de Torreón de que tenía “la mejor policía del norte de México” y este funcionario tan lo creyó así que publicitó su corporación preventiva con una campaña mediática en los medios de comunicación escritos y electrónicos así como gran cantidad de anuncios espectaculares con muchos millones de pesos, cuando la realidad era que, desde el año 2005, se demostró con pruebas irrefutables y el año pasado el mismo gobernador se lo dijo, que la policía preventiva de Torreón estaba permeada por el narco.
Hoy, la realidad que tarde que temprano tenía que surgir, ha demostrado la realidad de lo denunciado en Vespertino en aquel reportaje de enero del 2005 y lo que el año pasado le comunicó el gobernador Humberto Moreira, de quien no podemos negar que cuando hace una afirmación es porque tiene pruebas de ello, en el sentido de que la Policía Preventiva de Torreón protegía al narco.
No es fácil engañar a un político que, como José Ángel Pérez, se digna de tener una preparación académica y política de tal envergadura que le permita gobernar al municipio más importante del estado de Coahuila. No es fácil crearle, como Potemkin a la zarina rusa, una situación surrealista de la corporación en vez de la cruda realidad. “A los amigos se les hiere con la verdad para no matarlos con la mentira”, reza un adagio popular. Alfredo Castellanos no es amigo de José Ángel Pérez, sería la lectura de la interpretación del refrán popular.
Las mascaradas de Alfredo Castellanos fueron el programa anti drogas en la niñez y juventud identificado como DARE (por sus siglas en inglés) que si bien es importante, de acuerdo a las normas de seguridad se aplica cuando la policía preventiva es eficiente, y un programa de certificación mundial que no se ha llevado a cabo ---para lo cual supuestamente se estaba preparando a la policía--- y que ahora menos que nunca tendrá esa calidad de certificación nuestro cuerpo de seguridad por muchos años más.
No alcanzamos a comprender como se logra engañar de tal forma tan infantil a un alcalde hasta hacerlo tan miope que invierta muchos millones de pesos en tratar de proliferar en los medios de comunicación un sofisma que la ciudadanía, que sufría las consecuencias de la inseguridad y corrupción policíaca, estaba lejos de creer.
Lo peor del caso es que el alcalde y su partido, el PAN y con él sus corifeos regidores panistas, sí lo creían y hasta lo festejaban. No hubo uno de ellos capaz de hacerle ver la realidad a su jefe político; prefrieron el contubernio y el silencio con el cual ganan más que sacarlo de su craso error. También estos ediles son cómplices.
Es por eso, por la enorme dificultad de engañar a una persona de la talla de José Ángel Pérez y sus ediles corifeos panistas que resalta ahora la gigantesca capacidad histriónica de Alfredo Castellanos para “venderle” una mentira de gigantescas proporciones como una verdad absoluta, que debemos el reconocimiento al ex jefe policíaco y felicitarlo por tal cualidad que pocas personas puedan tener.
Y como todo en la vida, debe tener un costo político, José Ángel Pérez y su partido, el PAN, lo pagarán. El primero, perdiendo la oportunidad de ser candidato al gobierno de Coahuila ---lugar que Guillermo Anaya tiene ya sin obstáculos--- y el PAN con la disminución de votos en estas elecciones de diputados locales.
Alfredo Castellanos y el autor de esta colaboración procedemos de la misma empresa de seguridad privada, donde nos iniciamos en la materia de seguridad pública, pero ---debo reconocerlo--- como profesional de seguridad pública nunca me convenció, como “vendedor de ideas”...!Es el mejor del mundo!
Por: Manuel Padilla Muñoz
Hay que reconocerlo, Alfredo Castellanos, ex director de Seguridad Pública del Municipio de Torreón, debe ser el mejor vendedor del mundo. Dígalo si no: logró “venderle” la idea al alcalde de Torreón de que tenía “la mejor policía del norte de México” y este funcionario tan lo creyó así que publicitó su corporación preventiva con una campaña mediática en los medios de comunicación escritos y electrónicos así como gran cantidad de anuncios espectaculares con muchos millones de pesos, cuando la realidad era que, desde el año 2005, se demostró con pruebas irrefutables y el año pasado el mismo gobernador se lo dijo, que la policía preventiva de Torreón estaba permeada por el narco.
Hoy, la realidad que tarde que temprano tenía que surgir, ha demostrado la realidad de lo denunciado en Vespertino en aquel reportaje de enero del 2005 y lo que el año pasado le comunicó el gobernador Humberto Moreira, de quien no podemos negar que cuando hace una afirmación es porque tiene pruebas de ello, en el sentido de que la Policía Preventiva de Torreón protegía al narco.
No es fácil engañar a un político que, como José Ángel Pérez, se digna de tener una preparación académica y política de tal envergadura que le permita gobernar al municipio más importante del estado de Coahuila. No es fácil crearle, como Potemkin a la zarina rusa, una situación surrealista de la corporación en vez de la cruda realidad. “A los amigos se les hiere con la verdad para no matarlos con la mentira”, reza un adagio popular. Alfredo Castellanos no es amigo de José Ángel Pérez, sería la lectura de la interpretación del refrán popular.
Las mascaradas de Alfredo Castellanos fueron el programa anti drogas en la niñez y juventud identificado como DARE (por sus siglas en inglés) que si bien es importante, de acuerdo a las normas de seguridad se aplica cuando la policía preventiva es eficiente, y un programa de certificación mundial que no se ha llevado a cabo ---para lo cual supuestamente se estaba preparando a la policía--- y que ahora menos que nunca tendrá esa calidad de certificación nuestro cuerpo de seguridad por muchos años más.
No alcanzamos a comprender como se logra engañar de tal forma tan infantil a un alcalde hasta hacerlo tan miope que invierta muchos millones de pesos en tratar de proliferar en los medios de comunicación un sofisma que la ciudadanía, que sufría las consecuencias de la inseguridad y corrupción policíaca, estaba lejos de creer.
Lo peor del caso es que el alcalde y su partido, el PAN y con él sus corifeos regidores panistas, sí lo creían y hasta lo festejaban. No hubo uno de ellos capaz de hacerle ver la realidad a su jefe político; prefrieron el contubernio y el silencio con el cual ganan más que sacarlo de su craso error. También estos ediles son cómplices.
Es por eso, por la enorme dificultad de engañar a una persona de la talla de José Ángel Pérez y sus ediles corifeos panistas que resalta ahora la gigantesca capacidad histriónica de Alfredo Castellanos para “venderle” una mentira de gigantescas proporciones como una verdad absoluta, que debemos el reconocimiento al ex jefe policíaco y felicitarlo por tal cualidad que pocas personas puedan tener.
Y como todo en la vida, debe tener un costo político, José Ángel Pérez y su partido, el PAN, lo pagarán. El primero, perdiendo la oportunidad de ser candidato al gobierno de Coahuila ---lugar que Guillermo Anaya tiene ya sin obstáculos--- y el PAN con la disminución de votos en estas elecciones de diputados locales.
Alfredo Castellanos y el autor de esta colaboración procedemos de la misma empresa de seguridad privada, donde nos iniciamos en la materia de seguridad pública, pero ---debo reconocerlo--- como profesional de seguridad pública nunca me convenció, como “vendedor de ideas”...!Es el mejor del mundo!
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