!Fuego!/Lic. Consuelo Esquivel

¡Fuego!

Por la Lic. Consuelo Esquivel.
EL MAL GOBIERNO.- Es muy lamentable que el Presidente de la Comisión de Derechos Humanos, A. C., de la Sierra de Soetapan, Ver., don Ramiro Guillén Tapia, tras de muchos años de estar esperando la dotación de tierras y la solución de un conflicto agrario de la comunidad de Ocozotepec, por parte de la Secretaría de la Reforma Agraria, decidió poner fin a la espera: se paró enfrente del Palacio de Gobierno de Veracruz y en protesta por tanta desidia de parte de la Secretaría señalada, con toda calma, se arrimó un bote que contenía gasolina, se roció el cuerpo, y se prendió, convirtiéndose en una tea humana.
NO HAY RESPUESTA.- Para el gobierno Federal, un campesino menos, no es nada, al contrario, les alivianan la carga de dar respuesta a las demandas que día a día se presentan, ya sea porque terratenientes urbanos los despojan de sus tierras o aparentan que se las compran y nunca les pagan, haciendo sus trácalas con tanta suerte, porque los mismos funcionarios de la Reforma Agraria, se coluden con coyotes y presta nombres, para dejar en la calle a los ejidatarios que lo son, pero sin tierras.
DE DERECHOS HUMANOS.- Imagínese al ahora Ramiro Guillén Tapia, quemado en la mayor parte de su cuerpo, con quemaduras de segundo y tercer grado y que solamente sobrevivió unas horas después de este hecho tan lamentable, ¿usted cree, que por atentar contra su propia vida, resuelvan el problema? ¡No! Podrán pasar años, protestarán miles, y se inmolarán decenas, pero la burocracia seguirá con su “pachorra”, porque no les interesa la miseria y el dolor que viven cientos de familias que están en la desnutrición y el abandono, porque, la política neoliberal es eso: hacer más rico al rico y más pobre al pobre. Ahora, ¿quién habrá de defender a los campesinos de Ocozotepec?
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(Continuará mañana