jueves, 9 de octubre de 2008

Televisoras laguneras prostituyen la democracia

Televisoras laguneras
Prostituyen la democracia




Por: Manuel Padilla Muñoz
La Constitución política de México es un clara: las elecciones deben ser, entre otras cosas, equitativas, lo cual significa que todos los partidos y sus candidatos deben competir en igualdad de circunstancias.
Si en materia de promocionales en medios electrónicos, radio y televisión, se nota igualdad es porque la pauta la proporcionan los del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Coahuila en los tiempos oficiales, es decir, los tiempos que los medios de comunicación electrónica, como concesiones que son, por ley deben otorgar al gobierno.
La reforma electoral federal, al mismo tiempo, establece que los particulares, partidos políticos y candidatos no pueden comprar tiempo a los medios electrónicos para campañas políticas.
Sin embargo, como bueno mexicanos que somos, especialistas en buscar insólitos trucos para violar la ley, candidatos priistas, expertos en este tipo de trucos durante más de 60 años, están comprando tiempo subrepticiamente en canales de Televisión 9 y 4 de Televisa Laguna.
La prueba de lo anterior es que en ambas televisoras, en sus espacios noticiosos matutinos, todos los días entrevistas a los candidatos priistas a diputados locales.
Quienes nos dedicamos al periodismo sabemos que estas entrevistas no son gratuitas: se cobran a muy alto precio ya sea en efectivo o con favores posteriores. Pero de que cobran, se cobran.
Lo anterior provoca que las campañas sean inequitativas, carentes de igualidad, como lo establece la propia Constitución que deben ser todos los procesos electorales en México.
La consecuencia más grave es que los medios de comunicación electrónica, en este caso los canales 4 y 9, nada aportan para mejorar la democracia en México sino que la prostituyen porque cobran muy caras en forma subrepticia esas entrevistas que son campañas políticas alternas solamente para quienes pueden pagar esos miles de pesos; es decir, solamente para los candidatos ricos que ganarán votos a base de invertir dinero en forma ilegal.
Desgraciadamente, ni el IEEPC ni el IFE tuvieron la atingencia de monitorea los espacios noticiosos de los medios de comunicación, especialmente los electrónicos, y de esta manera aprovechan esta “laguna” para ganar ilegalmente dinero a costa de destrozar nuestra incipiente democracia.
Falta de conciencia social de esas dos televisoras; mercantilismo de los dueños de esas dos televisoras a quienes poco les importa la democracia mientras ellos ganen muchos millones de pesos. El daño es para México y para los mexicanos.
Los laguneros debemos castigar a esos violadores flagrantes de la ley.Por esta ocasión, en Coahuila no habrá verdadera democracia. Tal vez en el futuro

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