viernes, 13 de junio de 2008

Duro contra las cuentas "oscuras" del alcalde José Angel Pérez


Duro contra las cuentas “oscuras”
Del alcalde José Ángel Pérez


Por: Manuel Padilla Muñoz
El regidor presidente de la Comisión de Hacienda y cuenta pública del cabildo, Shamir Fernández Hernández, aseguró que van duro contra las cuentas “oscuras” del alcalde José Ángel Pérez Hernández porque hay elementos suficientes para proceder a una profunda investigación.
La nómina, por ejemplo, hay que ver como creció, hay que analizar los sueldos de algunos funcionarios, sobre todo de los que vinieron de otras ciudades y por qué se aumentaron los salarios porque hemos encontrado que los funcionarios que recibieron estos desproporcionados aumentos salariales, coincidentemente, son militantes panistas.
Dio a conocer el regidor Shamir Fernández que en lo que va de la presente administración, la nómina se ha elevado en un 47 por ciento, con respecto al 2005, que fue el último año de la gestión de Guillermo Anaya Llamas. Es decir, ha aumentado en estos dos años 96 millones de pesos.
Se quejó del doble discursos del alcalde panista quien asegura que no tiene nada que esconder y que las cuentas pueden ser consultadas. Sin embargo, cuando fue a hacerlo el presidente de la comisión de hacienda, el tesorero le negó el acceso.
Perversamente, dijo luego el alcalde que tiene que ser a través de la comisión de hacienda el solicitar los datos de la tesorería. Ahí está la perversidad pues cuando sometamos esta petición a la comisión de hacienda para hacerla efectiva, en vista de que la mayoría de los miembros son panistas, estos votarán por negar la solicitud y no se podrá acceder a las cuentas. No se quien está mintiendo; si se hacen o son mentirosos.
La semana pasada publicamos en Vespertino que en tan solos dos años, del 2006 al 2007, el alcalde panista de Torreón, José Ángel Pérez, aumentó en más de 120 millones el último año, para ingresar a la nómina municipal a cientos de simpatizantes y militantes panistas en su afán de controlar por ese medio a su partido para lograr ser candidato a gobernador del estado e imponer en los cargos públicos a miembros de su grupo.
En efecto, en el año 2005, el último de la gestión de Guillermo Anaya Llamas, el municipio gastó en nómina, un total de 265 millones 477 mil pesos. En el 2006, el primer año de gestión de José Ángel Pérez, la nómina fue elevada a 335 millones 954 mil pesos. Es decir, José Ángel Pérez aumentó en más de 70 millones de pesos tan solo en el primer año de gobierno.
En el segundo año, es decir, en el 2007, José Ángel ingresó cada vez más personal a la nómina hasta llegar a los 389 millones 725 mil pesos, lo que significa que, con respecto al último año de gobierno de Guillermo Anaya (2005), la nómina aumentó en más de 120 millones de pesos.
Este suceso inédito en el municipio de Torreón que ediles no aprueben las cuentas públicas, sobre todo porque en ese grupo se encuentran cuatro ediles panistas, correligionarios del alcalde, es el resultado de una crisis política de división al interior del PAN municipal, aunque lo niegue su presidente José Manuel Villegas.
Se confirma lo anterior porque los principales dirigentes del CEN del PAN le hicieron ver a su secretario general, el senador lagunero Guillermo Anaya Llamas, que debería intervenir para solucionar el caso pues aparte de que es parte de su función, es oriundo de esta ciudad.
Le dijeron que existe la orden de parte del CEN del PAN de que no pasen casos al TRIFE porque esto puede ser utilizado por loa partidos de oposición para exhibir al PAN.
En efecto, el año pasado, pasaron 850 casos al TRIFE que no pudo resolver el CEN del PAN, por lo que ocupó el primer lugar en quejas no resueltas mientras que el PRD obtuvo el segundo lugar con poco más de 600 quejas.
El caso de la profunda división que existe en el PAN de Torreón llegó ya a las altas cúpulas del partido en la ciudad de México.
Pero todo esto tiene un origen. El verdadero motivo de la rebelión de los cuatro regidores panistas en contra del alcalde, en efecto, tiene motivos políticos. Tanto las regidoras Monserrat Martínez Aguado, Karina García, Laura Elena Muñoz Franco como el síndico Eduardo Albores Potisek, en realidad no tienen motivos reales para su actitud en la última sesión de Cabildo. Como dijo Jack El Destripador, vamos por partes. Este grupo de ediles panistas había logrado la promesa de José Ángel Pérez de que los iba a apoyar para ser candidatos a diputados locales. Mientras estuvo vigente esta promesa, este grupo de regidores apoyaron siempre el capricho del alcalde panista de beneficiar a Promotora Ambiental (PASA) y todo lo que proponía en la sesión de cabildo, estuviese como estuviese. Ese fue el costo para el voto de los cuatro ediles al alcalde José Ángel.
El rompimiento vino cuando el pasado 15 de mayo empezaron a circular unas invitaciones del alcalde para sostener una reunión de “amigos panistas” con motivo del Día de la Madre, que se celebra, como todos sabemos, el 10 de mayo y cuya copia tenemos en nuestro poder. La invitación dice, textualmente: “Amigo panista: celebremos juntos el día de la madre, este sábado 17 de mayo a las 2:00 P. M. en Blue Moon (local propiedad del alcalde José Ángel Pérez). Te invitan: (Ojo, porque esto es lo más importante) José Ángel Pérez Hernández, Jesús Flores Morfín, Rodolfo Walls Aurioles, Pedro Ávila Aguilera, Gerardo Iván García Colmenero, Manuel Villegas González, Antonio de la Cruz Licerio, Jesús Martínez González, Florencio Javier Pérez Valenzuela.
Nótese, porque es de especial interés, que la invitación no la firmaban los ahora “ediles rebeldes” a los que José Ángel les había prometido apoyo para ser candidatos a diputados. Por lo que se trató en esa reunión, los “ediles rebeldes” pudieron darse cuenta que los posibles candidatos del grupo de José Ángel eran los regidores firmantes de la invitación y no ellos, lo que desde entonces consideraron una traición. Supieron incluso que el alcalde, que tiene el control de muchos panistas a quienes ha metido a la nómina, tiene como candidatos a la presidencia municipal al diputado federal Jesús Vicente Flores Morfín y a su secretario del ayuntamiento y principal operador y consejero político --- que también es el responsable de haberlo metido en grandes y graves problemas--- Rodolfo Walls Aurioles.
Fue entonces que los “ediles rebeldes” empezaron a acrecarse al grupo contrario, el del senador, ex alcalde, secretario general del CEN del PAN, primer compadre del país y futuro candidato a gobernador del PAN, Guillermo Anaya.
Existe una gran posibilidad de que la gota que derramó el vaso fue la “regañada” que le dio José Ángel Pérez a la mamá de Guillermo Anaya cuando esta y la ex secretaría de Anaya, Angélica Campos, se rebelaron contra el alcalde y su esposa “Maguicha” porque esta asaltó prácticamente el comité de Promoción política de la Mujer, un organismo paralelo dentro del comité municipal que ha sido manejado tradicionalmente por un grupo de damas militantes panistas desde hace muchos años y que tienen una calidad moral y peso específico al interior del partido. Es evidente que la regañada de José Ángel, más la amenaza de que sabe muchas cosas del ex alcalde, no se iba a quedar sin una reacción pues hasta en política es válida la ley universal física de que a toda acción corresponde una reacción.
Seguramente la actitud de los “ediles rebeldes” panistas obedece a una reacción del grupo de Guillermo Anaya Llamas. ¿O a poco ---ha de haber pensado Memo--- nos vamos a quedar así?

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